A lo largo de un ciclo completo de Saturno, hay dos momentos en las que sus anillos alcanzan su máxima inclinación relativa, unos 29°, y dos en los que se nos muestran de perfil, con una inclinación de 0°. En esta última configuración, los anillos son imperceptibles.
Las configuraciones de máxima inclinación y de perfil se repiten con períodos de entre 14 y 15 años.
En 1612, cuando Galileo observó Saturno, los anillos estaban de perfil, lo que le hizo percibir el planeta como una esfera, causándole gran asombro.
En 2025, a partir de finales de marzo, podremos contemplar nuevamente los anillos de Saturno de perfil, evento que se repetirá en tres ocasiones sucesivas en octubre de 2038 y en abril y julio de 2039. Entre estos eventos, en 2032, los anillos alcanzarán su máxima inclinación.